Si siempre le das huesos de carnaza a tu perrito, tienes que leer esto. ¡Cuidado! Estos podrían poner en riesgo la vida de tu "peludo"...
Así lo ha alertado la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA), de Estados Unidos, luego de conocer los casos de 68 perros que tras comer este tipo de huesos presentaron obstrucción intestinal, vómito, diarrea, asfixia, heridas en las amígdalas y lengua, sangrado ano rectal y, en los casos más severos, la muerte.
¿La causa? Los también llamados "bone treats" son procesados industrialmente y contienen colorantes, saborizantes y conservadores que pueden ser tóxicos.
A través de un comunicado, la FDA hizo un llamado para que las personas eviten darle huesos de carnaza a sus mascotas, a fin de prevenir efectos que atenten contra su bienestar.
Ya lo sabes, la próxima vez que quieras consentir a tu perro, mejor llévalo a dar un buen paseo. ¡Protégelo!
Nota Original FDA:
Razones para no darle huesos a su perro: Ya sean huesos caseros o comerciales:
La FDA publicó inicialmente este Artículo para el Consumidor en el 2015, y ha ofrecido información sobre este tema en su sitio web desde 2010. La agencia actualiza periódicamente el número de reportes en esta época del año como un recordatorio para los dueños de mascotas sobre los posibles problemas asociados con los huesos comerciales o los huesos de pavo o de pollo durante los días festivos.
Muchos dueños de perros saben que no deben darle huesos de pavo o de pollo a su perro; estos huesos son demasiado frágiles. Pero la Administración de Alimentos y Medicamentos de los EE. UU. (FDA por sus siglas en inglés) dice que el riesgo va más allá de eso, especialmente cuando se trata de los “huesos comerciales” (huesos naturales empaquetados) que se venden en algunas tiendas.
La FDA ha recibido aproximadamente 68 reportes de mascotas enfermas relacionados con los "huesos comerciales", que difieren de los huesos de carnicero sin cocer porque éstos se procesan y empaquetan para su venta como golosinas para perros. Los reportes se recibieron entre el 1 de noviembre de 2010 y el 12 de septiembre de 2017. Existe una variedad de huesos comerciales para perros que están disponibles comercialmente, incluyendo huesos descritos como "huesos de jamón", "huesos de fémur de cerdo", "huesos de costilla" y "huesos de nudillos ahumados", los cuales han sido nombrados en estos reportes. Los productos se pueden secar mediante un proceso de ahumado o cocción, y pueden contener otros ingredientes como conservantes, condimentos y saborizantes de ahumados.
Por la tanto, si usted planea darle a su perro un calcetín lleno de huesos de comerciales esta temporada de fiestas, tal vez quiera reconsiderarlo. Según Carmela Stamper, veterinaria del Centro de Medicina Veterinaria (CVM) de la FDA, "darle un hueso a su perro podría ocasionarle una visita inesperada a su veterinario, una posible cirugía de emergencia o incluso la muerte de su mascota".
Enfermedades reportadas
Las enfermedades reportadas a la FDA por los dueños y los veterinarios de perros que han comido huesos comerciales incluyen:
Los reportes enviados por los dueños de mascotas y veterinarios, involucraron a unos 90 perros (algunos reportes incluyen a más de un perro). Además, la FDA recibió siete reportes de problemas asociados a los productos, como huesos con apariencia de moho, o huesos con astillas al ser mordidos por la mascota.
Consejos para mantener seguro a su perro
Aquí hay algunos consejos para mantener a su perro seguro: