Los animales pueden ser muy divertidos, pero es importante que sepas cómo estar seguro cuando estás con ellos. Tanto los animales de interior como los de exterior deben recibir un buen trato en todo momento. Esto significa diferentes cosas según el animal y la situación.
Animales de exterior
Si sales afuera, te encontrarás un mundo lleno de animales para ver: desde ardillas en los árboles hasta pájaros surcando el cielo. En algunas partes del mundo, los niños pueden ver serpientes, murciélagos o incluso coyotes. Y no te olvides de los mapaches, las mofetas y otros bichos que salen por la noche en algunos lugares.
La regla, cuando estás al aire libre, es sencilla: No toques a ningún animal ni te acerques a él. Si bien algunos de estos animales parecen atractivos y simpáticos, debes dejarlos tranquilos. Estos animales no son como las mascotas. No están acostumbrados a estar cerca de las personas y podrían atacarte o morderte si te acercas a ellos. También pueden tener rabia.
Jamás intentes alimentar a un animal salvaje. Está bien tener un comedero para pájaros, pero jamás debes alimentar a otros animales, aunque parezcan estar hambrientos. Cuando se trata de estos animales, es mejor para todos que te mantengas alejado y los visites en el zoológico, en Internet, en los programas televisivos sobre la naturaleza o en los libros.
Jugar de manera segura con las mascotas
Las mascotas no te pueden decir si están enojadas o asustadas; por lo tanto, te lo demostrarán. Tal vez lo hagan con una mordida o un arañazo.
Para evitar las mordeduras y arañazos, haz lo siguiente:
- Nunca molestes a las mascotas cuando comen ni les quites el alimento o el agua.
- No molestes a los gatos y los perros, ni les tires de la cola o las orejas.
- Nunca molestes a una mascota mientras duerme.
- Nunca le quites un juguete o un hueso a un gato o un perro ni se lo muestres a una distancia que no lo pueda alcanzar.
- Nunca intentes pasar cerca de una mascota cuando esté con sus bebés (como un gato con sus gatitos o un perro con sus cachorros). Las madres animales son muy protectoras y te morderán para mantenerte alejado.
- Cuando saques a un conejo, un hámster, un conejillo de Indias o un jerbo de su jaula, hazlo lentamente. Asegúrate de sujetar al animal por debajo de su abdomen.
- Nunca levantes ni sujetes a un conejo de las orejas.
- Cuando saques a una iguana, una lagartija, una serpiente u otro reptil de su terrario, hazlo lentamente y con cuidado. Después, lávate inmediatamente las manos porque los reptiles pueden tener bacterias, como Salmonella, sobre la piel.
- Nunca coloques la mano desnuda dentro de una pecera; la mayoría de los peces no te pueden dañar. Pero algunos tipos de peces pueden lastimarte y pueden clavarte un aguijón si están enojados. Además, el agua contiene gérmenes que pueden provocar una infección en la piel.
- Si una mascota parece estar enferma o lastimada, mantente lejos de ella. Un animal al que normalmente le gusta jugar y que lo acaricien puede estar demasiado molesto e incluso morderte si no se siente bien. Dile a un adulto para que busque ayuda para el animal.
Cuando estés en la casa de un amigo, se aplican las mismas reglas y una más. Siempre pregúntale a tu amigo si puedes acariciar o sostener a su mascota. Si tu amigo dice que puedes hacerlo, muévete lentamente para asegurarte de que el animal te huela primero las manos.
Seguridad con un perro desconocido
¿Estás regresando a casa de la escuela y esperas no encontrarte con el perro que siempre corretea y ladra como loco? No eres el único. Con frecuencia, los niños se asustan de los perros que no conocen; en especial si el perro es muy ruidoso y su dueño no está cerca.
Para mantener la calma cuando estés cerca de perros, haz lo siguiente:
- Nunca toques o acaricies a un perro extraño; aunque corra hacia ti y parezca ser amigable.
- Si un perro comienza a correr hacia ti, no corras. Si sales corriendo, el perro tal vez quiera perseguirte; aunque no quiera lastimarte, su instinto le dirá que debe cazarte.
- Si se te acerca un perro extraño, intenta quedarte muy quieto. Esto puede ser atemorizante durante uno o dos minutos, pero pronto el perro se aburrirá y se irá. Si el perro trata de olerte, déjalo; es la manera de conocerte.
- Aléjate de un perro extraño caminando muy lentamente. No muevas los brazos ni hagas mucho ruido porque esto solo irritará al perro. Mira el horizonte y no mires al perro a los ojos.
- Si estás muy asustado de un perro extraño o si un perro extraño intenta morderte o atacarte, cuéntaselo a un adulto en cuanto sea posible. Tal vez puedan encontrar al dueño del perro.
Y una última palabra sobre los felinos, también conocidos como gatos: Si bien la mayoría de los niños no se asustan de los gatos extraños al igual que de los perros extraños, es buena idea mantenerse alejado de los gatos que no conoces. Nunca acaricies ni toques a un gato desconocido, aunque parezca ser amigable.
Guárdate tu amor para tus propios perros y gatos. ¡Sabes que te devolverán amor!